Eternity (in Spanish)

 

 

 

Capítulo 6

 

 

 

 

Brian POV

Miro hacia Justin y la luz de la luna brilla a través de su pelo rubio. No puedo evitar atraerle y besarle tiernamente. “¿Listo para ir?”

Me mira y ríe. “¿Contigo? Bueno, no estoy seguro. ¿Y yo que saco?”

Acercando más nuestros cuerpos, rozo mi polla dura contra su pierna. “Hmm, hay muchas posibilidades. Creo que la pregunta debería ser: ¿Qué tendré dentro?”

Justin frota juguetonamente mi erección a través de la ropa. “Ah, ¿sí?” Inclina la cabeza, lamiéndose los labios traviesamente. “Solo hay una posibilidad de que esté interesado...”

Interrumpo su línea argumentativa capturando sus labios en un beso arrasador, deslizando la lengua en su boca mientras gime contra mis labios. Agarro la espalda de su camisa desesperadamente necesitando estar dentro de él.

Continúo diciéndome a mi mismo que esta es solo una forma de olvidar todo lo que ha pasado hoy. De alejar mi mente de todo lo que me dijo Gwen, pero sé que realmente no es así, necesito a Justin más que nada. Nunca pensé que sentiría esto por nadie y me acojona. No estoy preparado para decirle cómo me siento. Nadie necesita conocer mis más profundos e íntimos secretos, especialmente Justin.

Deslizando mis labios hacia abajo beso su mandíbula y su cuello, chupando su nuez. Justin emite un gemido desde el fondo de su garganta y sonrío, feliz de poder darle esta clase de placer. Recorro con la lengua el lóbulo de su oreja, lo mordisqueo dulcemente, escuchando como su respiración se vuelve irregular.

“Oh mierda, ¡Brian! ¡Joder! ¡Te necesito ahora mismo!” Justin clava sus dedos en mi espalda y dejo escapar un gemido, luchando por respirar mientras asiento con la cabeza. Le empujo, cogiéndole de la mano y guiándole hacia el jeep. Justin salta automáticamente en el asiento de atrás.

Miro sorprendido la lujuria que llena sus ojos. “¿Qué coño haces?”

Me agarra de la parte delantera de la camisa, arrastrándome al asiento trasero con él. “No estás lo suficientemente sobrio como para conducir, además quiero que entres en mi ahora mismo,” dice ronco

Cierro la puerta tras de mí y me siento en el asiento trasero levantando una ceja. “¿Quieres que te folle aquí?”

Justin asiente con la cabeza, sonriendo travieso, y cuando habla su voz es baja y envolvente. “Sí, justo aquí.” Lentamente desabrocha los botones de mis vaqueros y agarra mi dura polla. Su contacto es tan familiar y tan bueno, como si cada vez que me tocase fuese la primera vez. Siempre puede enviar escalofríos por todo mi cuerpo. Sacude ligeramente mi palpitante polla y luego rápidamente baja la cabeza, tomándome entero en su boca.

Dejo escapar un suspiro y un jadeo profundo hasta que finalmente soy capaz de controlar la respiración. Río. “Sunshine, me da la impresión de que me echabas de menos.”

Justin me mira, sonriendo alrededor de mi polla y asiente con la cabeza dejándome salir de su boca. Agarra mis pantalones, y levantando mis caderas, me los saca, perdiendo casi el equilibrio en nuestro estrecho espacio. Justin ríe, y sonriendo, se quita los pantalones con gran dificultad.”Esta es en la clase de aprietos que solemos meternos,” dice tímidamente.

Riendo, le atraigo a mi regazo mientras se sienta a horcajadas sobre mis piernas. “Mmm, y espero estar en un aprieto aún mayor pronto.” Me agacho y lamo su cuello

Puedo sentir a Justin temblando sobre mí mientras apoya la cabeza en la curva de mi cuello y habla dulcemente. “Contestando a tu pregunta: si te eché de menos. Ha pasado una semana desde que estuve contigo.” Se echa hacia atrás y me mira fijamente.

Le miro desconcertado y hablo dulcemente. “¿Intentas decirme que hace una semana que no tienes sexo?” me mira tímidamente, asintiendo. Moviéndome acaricio amorosamente su mejilla con los dedos. Responde a mi contacto y susurro, “Estoy seguro de que podrías haber encontrado a alguien que cubriese tus necesidades.”

Su expresión se vuelve seria. “No... quiero decir, sí podía, pero no quería. Brian eres el único hombre que quiero que me folle. Sé que no quieres oírlo, que te gusta jugar fuera pero yo no puedo. Quiero que tú seas el único.” Entonces formula la pregunta que tanto estaba temiendo: “¿Qué hay de ti? ¿Has estado con alguien?”

Tragando hago memoria de mi pasada semana intentando recordar a todos con los que estuve. Me doy cuenta que no puedo pensar en nadie y murmuro. “No puede ser”

“¿Qué no puede ser?”

Cuando le miro se que debo parecer flipado “Yo no- no he estado con nadie tampoco,” tartamudeo. Mientras lo admito, todo está muy claro para mí, pero todavía no puedo decirlo en alto. Lo considero de nuevo: ‘¿Qué me está haciendo este hombre?’

Me sonríe de oreja a oreja. “¿De verdad?”

Acercándome muerdo sus increíbles labios, luego le hablo seriamente. “Sí, pero no me hagas repetir estas palabras jamás porque las negaré.”

Justin ronronea en mi oído. “Estas tan jodido, Brian Kinney.”

“¡Y tu eres tan idiota!” golpeo su culo desnudo y Justin grita luego desliza su brazo alrededor de mi cuello, atrayéndome en otro rabioso beso.

Froto mi polla contra la suya y volvemos a caer en nuestra pasión. Justin muerde fervorosamente, lame y muerde en la piel sensible alrededor de mi cuello y mis hombros. Su sedoso pelo acaricia mi cara y respiro en él profundamente, absorbiendo el aroma de mi amante, dejando que su esencia penetre en mi alma. “Dios, hueles tan bien,” jadeo, arqueando la espalda por el placer que me está provocando. Justin mete sus manos por debajo de mi camisa por mi pecho, riendo mientras la saca por mi cabeza.

Lame mi cuello hacia abajo y mi pecho, girando su lengua caliente alrededor de cada pezón, absorbiendo ligeramente primero y luego un poco más bruscamente, mordiendo mi tierna piel. Gruñendo, froto mi rigidez contra él, quitándole la camisa con urgencia y lanzando mi propio ataque contra su cuerpo hasta que Justin se retuerce de placer, rogándome que entre en él.

Sacando un pequeño tubo de lubricante y un condón de la ropa que nos hemos quitado, aplico lubricante en mis dedos generosamente moviéndolo para calentarlo. Justin se levanta ligeramente y yo froto suavemente su zona sensible, sintiéndole contraerse y relajarse, gimiendo, queriendo más. Lentamente meto un dedo y él me sonríe y luego se lame los labios seductoramente. Cuando añado el segundo deja escapar un gemido y comienza a follarse mis dedos.

Envuelvo su cuello con mi otra mano y presiono mis labios contra los suyos, empujando mi lengua dentro de su boca, queriendo saborear cada parte de él. No puedo saciarme y frenéticamente añado un tercer dedo, entonces el baja, apretando estrechamente. Mi respiración se complica por su intensidad y envuelvo su polla con la mano cascándosela hasta que jadea para respirar; “¡Brian para! No quiero correrme así. Te necesito dentro de mí.”

Coloca el condón en la punta de mi pene, desenrollándolo lentamente por mi miembro y jadeo por respirar mientras nos miramos. Se agarra firmemente en mis hombros mientras baja sobre mi polla. Dejo escapar un profundo gruñido desde el fondo de la garganta mientras escucho a Justin gemir y su calidez se filtra a través del condón. Sé que no es lo mismo pero aún así puedo sentirlo y me pregunto cómo sería follarle a pelo. Rápidamente, desecho el pensamiento de mi mente sabiendo lo irreal que es.

Firmemente, pongo las manos en sus caderas, intentando demostrarle lo mucho que significa para mí sin palabras. Solo hablan nuestros cuerpos, susurrando nuestros deseos no expresados. Mientras le muevo encontramos el ritmo que nuestros cuerpos conocen tan bien. Embisto contra él y me recibe con la misma fuerza apretando estrechamente a mí alrededor. Agarro su tranca y se la sacudo urgentemente y él monta mi polla sacándola casi totalmente, y luego dejándose caer hasta que nos lleva a ambos totalmente al límite.

“¡Joder!” grito en éxtasis mientras Justin deja escapar un alto gruñido, lanzando su corrida entre los dos, entonces un segundo después llega mi propio orgasmo.

Nos quedamos así durante un momento, recuperando la respiración, y Justin coloca tiernamente sus dedos bajo mi barbilla. Besa ligeramente mi nariz, alejándose mientras me sonríe brillantemente. “Eso ha sido un polvo. Tal vez siempre debiésemos esperar una semana.”

Río juguetón. “No lo creo, Sunshine. Ahora que te tengo aquí, solo puedo pensar en volver a aprovecharme de la situación.”

 

+++++

 

Justin POV – más tarde en el loft

Tumbado en la cama de Brian soy incapaz de dormir. Ahora mismo tengo demasiados pensamientos rondando mi cabeza. Me giro para mirar a Brian dormir. Parece tan en paz cuando tiene todas las barreras bajadas. La pasada noche cuando me hizo el amor, había algo tan diferente en ello. Aunque fue acalorado y casi frenético, definitivamente había una ternura que nunca había sentido realmente con él antes. Cuando confesó no haber estado con nadie más en una semana pude sentir como se me quedaba la respiración en la garganta.

Quiero mucho a este hombre y temo que me aleje con el tiempo. Sé que le asusta el compromiso.

Levantándome, dejo un pequeño beso en su frente y bajo al salón. Me siento en el sofá y escucho su respiración superficial, sintiéndome en paz sabiendo que está bien, aquí ahora mismo está conmigo. También me pregunto cuánto durará.

Cojo mi petate cerca del sofá y saco una pequeña caja de madera tallada a mano. Sujetándola nerviosamente en mi mano pienso en las pequeñas cosas que no le dije a Brian. Que no solo soy un artista sino que también tallo madera y hago joyas. No estoy seguro de por qué no se lo dije nunca. Creo que tal vez tengo miedo de que se asuste ante la mención de la joyería; bueno no solo de la joyería sino de mi especialidad- los anillos artesanales.

Miro la caja de roble en mi mano sabiendo perfectamente bien lo que reside en ella. Abriendo la caja miro al anillo de triple oro, apoyado sobre el terciopelo púrpura. Lo saco de la caja, y recorro con mis dedos los signos celtas. Siento dolor en el corazón sabiendo que no es el momento, luego me doy cuenta de que puede que nunca sea el momento adecuado. Coloco el anillo de vuelta y mezo la caja en mis manos apoyando los dedos contra mis labios, pensativo.

Devuelvo la caja a la bolsa y miro la alianza plateada que Ethan me dio hace quince años. Han pasado cinco desde que se fue, pero no he sido capaz de quitarme el anillo o seguir adelante completamente.

Ahora, más que nada en el mundo, quiero a Brian en mi vida. Estoy listo para dejar atrás mi vieja vida. Sé que nunca olvidaré a Ethan, él fue mi mundo durante muchos años, pero ya no está aquí y no puedo seguir viviendo bajo su sombra. Por mucho que me gustaría quedarme en mi zona segura sé que debo avanzar. Mirando la vieja alianza ahora sé que es momento de seguir. Me quito el anillo y siento una punzada en el pecho mientras una única lágrima rueda por mi mejilla y digo adiós a mi difunto amante; esperando y rezando que entienda por qué estoy avanzando. Emitiendo un breve jadeo pongo el anillo en un bolsillo de mi petate y dejo que se cierre mi vieja vida y la nueva comience.

Vuelvo a la habitación y trepo de nuevo a la cama con Brian. Su cálido cuerpo encuentra el mío y mientras apoyo mi cabeza en su pecho desliza su brazo a mí alrededor enterrando su cabeza en mi pelo. Suspirando, dejo que el sueño me invada.

 

+++++

 

Brian POV

Me despierto sintiendo el calor del sol en mi piel y me giro para mirar a Justin. Dulcemente poso la mano en su mejilla y él se gira hacia mí pero no despierta. Noto que frunce el ceño y me pregunto qué le está preocupando. Anoche me desperté en la cama vacía, lo que no es extraño, pero teniendo a Justin por aquí durante el último mes raramente ha vuelto a estarlo. Le vi sentado en la oscuridad sujetando algo en la mano, meditando profundamente.

Quería acercarme a él y ver si estaba bien, pero decidí que no. Volvía tumbarme en la cama preguntándome si tendría que ver con Ethan. Justin nunca me ha hablado de él, pero veo en sus ojos cuánto le echa de menos. Justin es una persona muy sentimental y conserva una foto de su difunto amante en la cartera y también lleva una alianza de plata en la mano derecha que supongo que le dio Ethan. Intento no tener celos de un fantasma, pero veo que cada vez soy arrastrado más y más hacia Justin; una situación que me asusta y me deleita.

Mirando a mi amante observo su belleza, memorizando cada parte de él. Mis ojos se posan sobre su mano derecha y veo que el anillo ya no está en su sitio, solo una marca me permite saber que una vez existió. Suavemente, rozo mi dedo por el lugar vacío y me duele el corazón por Justin. Sé que debe haber sido difícil para él quitársela. Me pregunto por qué lo ha hecho ahora.

Perdiéndome profundamente en mis pensamientos se me olvida que estoy rozando su dedo sin anillo. Los ojos de Justin se abren parpadeando y veo una cautelosa mirada en sus ojos azules. Todo lo que puedo hacer es preguntar, “¿Por qué?”

Justin se aclara la garganta y se sienta, acercándose a mí y susurrando. “Porque era el momento.”

Asiento con la cabeza entendiendo y envuelvo su cintura con mi brazo y con mi otra mano, aparto ligeramente el sedoso pelo rubio de sus ojos. “No tenías que hacerlo. No espero que olvides.”

Sonríe con satisfacción, y cogiendo mi mano libre con la suya, entrelaza nuestros dedos. “¿sabes lo que amo de ti?” acaricia el lateral de mi mejilla con la otra mano, usando la parte regordeta de su pulgar. Sus ojos azules brillan con renovada energía.

Me acerco a su contacto, sintiéndome un poco preocupado por su uso de la palabra amor. Temblando fuertemente, puedo sentir las emociones calando profundo dentro de mí mientras contesto. “No ¿qué?”

Me besa dulcemente en los labios. “Nunca tuve que hablarte de mi pasado. Me aceptaste con todos mis defectos, y tengo muchos, pero lo que más amo de ti es que me respetas, y nunca me has preguntado por Ethan. Solo me dijiste una vez que lo sabías, y te lo agradezco. Por no hacerme sentir como si tuviese que explicar mi pasado. Y aunque es muy duro para mi dejarlo atrás, sé que es el momento de avanzar. Solo espero con todo mi corazón poder avanzar contigo.”

Antes de levantarse Justin me besa en la frente luego se dirige al baño, dejándome solo con mis pensamientos. Apartando mis emociones me pregunto cómo alguien puede quererme tanto cuando nunca merecí ser amado.
 

Return to Eternity