Eternity (in Spanish)

Capítulo 27

Brian POV

Conduzco por el camino, Lindsay parlotea sobre todo lo que se supone que tenemos que hacer. Miro a Gwen, que se muerde ausente las uñas mientras Mamá Oso le acaricia los hombros desde el asiento trasero.

Prefiero no decir nada en la menguante luz del anochecer y avanzo por la rocosa carretera llena de baches. “¡Joder!”

Las tres se giran hacia mí y preguntan al unísono, “¡¿Qué?!”

No puedo evitar reír por lo bajo. “No puedo creer que Guinevere consiguiese convencerme para celebrar la boda junto al río. ¿En que cojones estaba pensando?”

Lindsay me da un capón desde su asiento tras el mío. “Vamos, vamos, Brian, será bonito y romántico.”

“Hará un frío de cojones. ¿No ves en los matorrales y los árboles como empieza a helar?”

Por el rabillo del ojo veo a Gwen negando con la cabeza. “Y yo no puedo creer que convencieses a Jonathan para llevar un puto traje.” Me mira juguetona y luego ríe. “Ni siquiera tu llevas un traje de boda.”*

Paro el Jeep al llegar a nuestro destino y me estiro el traje. Lo miro y luego miro a Gwen. “Pero mamá dice que estoy guapo,” la sonrío

Se ríe y me golpea juguetonamente. De repente nos sobresaltamos todos al escuchar a alguien llamando a la puerta del Jeep. A Gwen casi le da un ataque y  grita y lo mismo hacen Mel y Linds. Me río de todo corazón por el grito provocado por las leyendas urbanas. Bajo la ventana y miro a Emmett, sin querer que vea el humor en mis ojos. “Asustaste a las damas.”

Se cubre la cara con las manos. “Lo siento. No quería asustaros.” Mira al interior del Jeep. “Oh Dios, dios, ¿no están increíbles las novias?”

Pongo una mueca por su comentario y le miro a los ojos. “No soy una jodida novia, lárgate.”

Emmett me golpea en el hombro y me estremezco ante su contacto. “Bueno, bueno, pequeño, no te quites la ropa interior todavía.”

“No llevo.”

“¿Eh? ¡Ah! Oh dios, eso es…oh.” Agita las manos delante de la cara.

Río con naturalidad. “Ahí está. Te pongo cachondo.” Digo con prepotencia. “Sé que pongo cachondos a todos los gays. ¿Qué puedo decir? Es un don,” contesto con la lengua en la mejilla.

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Gwen POV

Escucho el fluir del agua del río y empiezan a calmarse mis nervios. Me quito los zapatos y hundo los pies en la fina arena,  sintiendo la cosquilleante sensación de la tierra bendiciendo dulcemente mis pies. Cierro los ojos e inspiro profundamente, observando una luz blanca rodeando cada uno de mis chacras**. Un hormigueo de energía purificadora cae sobre mí como gotas de lluvia. Inspirando una última bocanada sanadora miro al cielo y veo que el sol comienza a ponerse. Sonrío para mí misma sintiéndome más segura de lo que lo estaba unos momentos antes.

Miro a papa y sonríe, apaga el cigarro, luego camina hacia mí. “¿Lista, calabaza?”

Asiento y cojo mi ramo que había dejado sobre el suelo un momento antes. Dulcemente paso los dedos sobre el exclusivo arreglo floral de colores apagados. Sonrío cuando veo un par de oscuras y vibrantes rosas rojas. Sé que este es un toque que añadió tita Em. Me conoce muy bien.

Deslizo los dedos sobre los dos colgantes de pentagrama atados con cinta alrededor de los tallos de las flores.

Papá carraspea y levanto la vista para verle sonriéndome profundamente. Enlaza su brazo con el mío. “Vamos, calabaza. Es la hora de pasar por esto y acabar con ello.”

Lanzo una carcajada. “Papi, sabes que te encanta toda esta atención.”

Sonríe asintiendo. “No lo cuentes por ahí.” Río y comenzamos a avanzar por el camino. Para de repente y siento una presión en el pecho sin saber en qué está pensando. Estoy aliviada cuando pregunta. “¿Vas a volver a ponerte los zapatos?”

Le miro avergonzada. “Oooops”

Ríe suavemente. “Si, oops. No podemos dejar que te pongas mala antes de tu luna de miel.” Niego y recupero los zapatos.

Mientras entramos en el claro puedo escuchar la melodía celta que Crystal está tocando con el violín. Veo a Jonathan justo ahí y está tan guapo como siempre. Justin está de pie a unos cinco pies de él. Detrás de Justin y Jonathan están nuestros amigos y familiares, de pie hombro contra hombro formando dos líneas separadas como si formasen un pasillo humano. Papi me lleva hasta Jonathan depositando mi mano en la de mi amante. Dice dulcemente. “Cuídala.” Podría decir que quiere añadir algo más, pero las emociones que veo en sus ojos me dicen que no es capaz.

Mientras Jonathan y yo avanzamos por el pasillo nuestros amigos y familiares lanzan pétalos de rosa secos a nuestros pies. Sonrío al escuchar a mi pandilla cantando una melodía de amor y unión. Fluye en perfecta armonía con la música que brota del violín. Miro a Crystal y me guiña un ojo, mostrándome que lo habían planeado todo. Me encanta el toque añadido y dejo que sus voces lleguen a las profundidades de mi alma.

Miro a Jonathan y tiene una ligera sonrisa en la cara. Cuando me mira le pregunto suavemente. “¿Sabías que iban a cantar?”

Asiente. “Si.”

“¡Me encanta!”

Ríe ligeramente. “Sabía que lo haría.” Luego me besa brevemente en la mejilla mientras nos paramos al final del pasillo. Levanto la vista para ver al mejor amigo de Jonathan, Sebastian, de pie en la entrada del círculo sagrado formado por piedras blancas. Su rizado pelo rojo cuelga desordenado sobre sus hombros y nos sonríe brillantemente, acentuando su hermosa barba recortada y su bigote. Siempre me recordó a un guerrero escocés con su complexión fuerte y brusca, aunque con voz tranquilizadora.

Cuando nos acercamos a él hace una reverencia con la cabeza y coge nuestras manos unidas. Dulcemente las sostiene entre las suyas mientras se acerca para besarnos a ambos en la mejilla. “Mis dos queridos amigos, gracias por dejarme formar parte de vuestro día especial.”

Jonathan mira a su amigo afectuosamente. “Eres nuestro hermano en espíritu. No lo habríamos hecho de ninguna otra forma.” Después baja su voz. “pero si tengo que llevar este jodido traje toda la noche rodarán cabezas.”

Sebastian ríe con naturalidad y guiña, mirando su propio traje. “Sé lo que quieres decir. Tengo nuestras ropas de recambio en el coche. Podemos cambiarnos antes de la recepción.”

Jonathan sonríe de oreja a oreja. “Eres un gran tipo.”

Sebastian ríe suavemente y asiente comprensivamente. Mirando en la profundidad de sus ojos de zafiro me sumerjo en la intensidad de su espiritualidad. Inspira una bocanada purificadora. Puedo sentir la hormigueante sensación recorriendo mi cuerpo mientras aspiro mi propia bocanada purificadora.

Habla serenamente, pero lo suficientemente alto para que todo el mundo le oiga. “Jonathan y Guinevere, ¿entráis en este sagrado circulo con la mente abierta a la fe y el amor?” aprieta nuestras manos con cariño.

“Si,” contestamos al unísono. Sebastian se aparta permitiéndonos entrar en el círculo.

De pie en el círculo veo con los ojos empañados como nuestros padres avanzan hacia el círculo sagrado mientras pétalos de rosa secos caen a sus pies. Veo a Justin susurrar a mi padre haciéndole sonreír, y juro que veo un liguero rubor surcar su rostro.

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Brian POV

Justin y yo entramos en el círculo sagrado y nos paramos cerca de nuestros hijos mientras Sebastian habla con nuestros amigos y familiares. Pregunta a cada uno si entra con la mente y el corazón abiertos. Enciende cada una de sus velas mientras entran en el círculo sagrado, formando otro círculo a nuestro alrededor. Siento la emoción crecer dentro de mi mientras la luz de las velas comienza a iluminar el anochecer, alumbrando nuestros espíritus.

Justin se gira hacia mí y me coge las manos entre las suyas. Siento una corriente de fuerza saliendo de él y entrando en mí. Sonríe y me guiña un ojo y noto que Gwen y Jonathan están de pie cara a cara, sonriendo de oreja a oreja. Una luz blanca parece emanar de ellos.

De repente soy arrancado de mis pensamientos por una desbordante presencia que nos rodea. La respiración se me queda en la garganta cuando veo las formas translucidas de amigos y seres queridos que se han ido. Tan rápido como las veo, las apariciones se desvanecen, pero todavía puedo sentir su amor y aceptación fluyendo hacia mí. Luego oigo el ruido de risas de niños. Abro los ojos rápidamente y durante un breve momento veo lo que parecen dos niños pequeños corriendo alrededor juguetonamente. Envueltos en una luz blanca que parece emanar de ellos, mostrando cada uno de sus rasgos. Siento fuertemente en mi alma que son espíritus gemelos y me pregunto qué significarán y quienes son o serán para mí. Tan rápido como los veo parecen desaparecer.

La voz de Sebastian me saca de mis pensamientos. “Antes de empezar me gustaría desear a todos un bendito Samhain***. Gracias a todos, nuestros amigos y familiares de esta y otras dimensiones por unirse a nosotros para celebrar que estas parejas van a entregarse su vida y amor. Me apartaré para dejar que nuestras queridas parejas compartan sus votos entre ellos y con nosotros.

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Gwen POV

Crystal camina hacia mí, le tiendo el ramo y lo sujeta por mí mientras desato los colgantes de la cinta. Sonríe y vuelve al círculo. Cuando le tiendo uno de ellos a Jonathan me coge la mano y traza tiernamente un pentáculo con su dedo en mi palma. “En mi mente siempre estás conmigo. En mis sueños, me mantienes a salvo. Cada momento que estoy alejado de ti, me siento perdido. Cada minuto que paso contigo me siento renovado y con el espíritu libre.” Me mira directamente a los ojos y me sumerjo en sus ojos azules, que están surcados de lágrimas. “Nunca conocí a nadie como tú. Me has hecho un hombre mejor de muchas formas. Me has ayudado a mirar en mi espíritu y mi alma y ser honesto conmigo mismo. Quiero volver a casa contigo cada noche y despertar contigo cada mañana más que nada en este mundo.” Dulcemente coloca el pentáculo alrededor de mi muñeca “¿Me harías el honor de caminar conmigo a través del tiempo y la eternidad como mi esposa?”

Le sonrío mientras contengo mis propias lágrimas. “Quiero y lo hago.”

Siento una lágrima resbalar por mi mejilla y el la seca dulcemente con el pulgar mientras susurra, “Eres la esencia de mi tiempo.”

Cogiendo la mano de mi amado trazo un pentáculo en su palma. “Eres mi respiración y el latido de mi corazón. Eres mi fuerza y mi valor. Me ayudas a ver más allá de mi propia comprensión. Me has ayudado a convertirme en una persona mejor y me has amado a pesar de mis defectos. Más que nada, quiero caminar a tu lado en lo bueno y en lo malo. Eres mi amado Inmortal.” Suavemente coloco la mano en la suya y enrollo el colgante alrededor de ellas. “¿Me harías el honor de ser mi esposo en esta vida y seguirme a la siguiente?”

Sonríe, “Si, te seguiría a cualquier parte.” Colocamos nuestras manos libres sobre las que tenemos unidas. Inclinando nuestras cabezas inspiramos profundamente varias veces. Puedo sentir su calor llegar hasta mí mientras repetimos juntos:

“El viento ha cambiado nuestras almas para ganar,

Nuestro amor es verdadero para siempre,

Querré estar contigo, en nuestro consuelo y nuestra paz,

En nuestra tristeza y en nuestra felicidad estamos en nuestros corazones y almas.

Invocamos al Dios y a la Diosa para que nos guíe y nos ayude a través de nuestro viaje en nuestras nuevas vidas juntos en espíritu, mente y corazón.

Así debe ser.”

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Brian POV

La luna llena brilla sobre Gwen y Jonathan mientras intercambian sus votos. Las lágrimas se forman en mis ojos viendo el amor que se profesan el uno al otro. Jonathan desenlaza delicadamente uno de los colgantes y  lo coloca alrededor del cuello de Guinevere. Ella le sonríe y hace lo mismo. Jonathan sonríe brillantemente y se acerca a Gwen y luego coloca la mano alrededor de su cuello mientras se agacha y la besa apasionadamente.

De repente siento sus ojos sobre Justin y sobre mí. Gwen asiente para darnos valor para avanzar.

Justin me guiña el ojo y siento mi corazón fundirse. Coge mis dos manos girándolas para que las palmas miren hacia arriba. Masajea el interior de mis manos con sus pulgares, acaricia dulcemente el anillo que no me he quitado desde el día que me lo dio. “Brian,” su voz está llena de emoción e intento contener la mía. “Cuando te conocí hace ocho meses supe que había algo especial en ti. Durante estos meses he descubierto que nos habíamos conocido antes, una y otra vez. Me has ayudado a crecer como persona. Hemos tenido que compartir tiempos difíciles aunque la mayoría han sido buenos. Quiero compartirlo todo contigo, lo bueno y lo malo, el aquí y el ahora, y también lo que está por venir. ¿Me aceptas como compañero?” me mira tímidamente. “Y no quiero decir compañero en el crimen” ríe y yo también. “Sino compañero en el amor, compromiso y entendimiento. No tengo nada más que darte que mi corazón.”

Apoyo mi frente en la suya. “Eso es todo lo que necesito.” Me aparto y le sonrío juguetonamente con los ojos llenos de lágrimas. “Si por alguna razón nuestro viaje me lleva a ser tu compañero en el crimen, también estaría contigo.”

Ríe y agacha la cabeza mientras se sonroja. “¡Brian!”

Río suavemente. “Lo sé. Soy tan patético.”

“¡No, en absoluto!” coloca la mano en mi mejilla. “Eres ridículamente romántico y eso es lo que me gusta de ti. Puedes ser un grandísimo gilipollas, pero me has enseñado tu otra cara. Te agradezco que me dejaras entrar en tu alma y tu corazón.”

Cojo las manos de Justin en las mías y sonrío tratando de mantener mis sobrecogedores sentimientos bajo control. Tras unos minutos me encuentro a mi mismo deslizándome en ellos y hablando simplemente desde el corazón. “La primera vez que te vi supe que había algo especial en ti. Incluso cuando nos conocimos siendo unos críos, te quería. Tome tu silencio como una mala señal y huí. He estado huyendo toda mi vida; alejándome de las relaciones y el amor. Cuando nos reencontramos sentí dolor en el corazón pero era un dolor placentero.” Inspiro profundamente y mi voz se quiebra cuando continuo. “Sentí como si estuviese siendo restaurado, como si tuviese una segunda oportunidad contigo, incluso sin tener ni idea de quién eras en ese momento. Aunque, creo que mi espíritu lo sabía.” Me sonríe y me aprieta las manos amorosamente mientras continúo. “has derribado mis muros y me has ayudado a ver un mundo nuevo.” Suelto una de mis manos y le recorro la mejilla con los dedos. “Eres tan hermoso, mi amor.” Le sonrío. “Quiero, más que nada, la oportunidad de compartir la vida contigo como mi compañero. No tengo nada más que darte, excepto mi lealtad, porque te di mi corazón la primera vez que te vi.”

Me hundo en los azules ojos de zafiro de Justin. Veo las lágrimas formándose desde sus pestañas y sé que las mías están igual. Lleva su brazo alrededor de mi cuello y me acerca en un beso apasionado. Sus labios son cálidos y amorosos sobre los míos mientras me susurra. “Te quiero, Brian, más que a nada en este mundo. Quiero ser tu compañero en esta vida y en las que vengan.”

“Yo también, también te amo,” río mientras siento la lágrima caer por mi mejilla. Justin la besa para apartarla y luego me vuelve a besar más fervorosamente que antes.

Puedo oír los vítores de nuestros amigos y familiares y levanto la vista para ver que Gwen y Jonathan también se están besando.

Sebastian dice que estamos comprometidos de por vida y entonces Crystal toca de nuevo el violín, mientras nuestros amigos y familiares abandonan el circulo para volver a formar el pasillo. Gwen y Jonathan avanzan por el camino de velas abandonando el círculo.

El brillo es tan pacífico y miro hacia Justin, que sonríe radiantemente. Agachándome pongo los labios sobre los suyos. “Bueno ya no hay vuelta atrás,” digo juguetonamente.

Ríe y luego me besa. “Nunca querría dar marcha atrás.”

Apoyo mi frente contra la suya. “Yo tampoco.”

Le cojo de la mano mientras seguimos a nuestros hijos fuera del círculo y hacia nuestra nueva vida.

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