Eternity (in Spanish)

Capítulo 25

Gwen POV

Tan pronto como mamá me dice que ha pasado con la abuela me dirijo a buscar a Gus. Dudo un momento mientras me quedo fuera de su habitación. No quiero interrumpirles a los tres. Apoyo la oreja contra la puerta y suspiro aliviada cuando sólo escucho silencio.

Llamo suavemente a la puerta y cuando nadie contesta la abro un poquito para mirar dentro.

Una sonrisa se extiende en mis labios cuando veo a Sara, Gus y Zack durmiendo en la cama de Gus. Todavía están completamente vestidos y acurrucados los unos en los otros, haciendo difícil decir donde empieza el cuerpo de uno y termina el del otro. La cabeza de Gus está en el cuello de Sara y su sujetador rosa se ve un poco. Me acerco un poco de puntillas y veo que los dedos de Gus están atrapados bajo el tirante y Zack está acurrucado detrás de Gus con su brazo alrededor de sus dos amantes.

Intento no reírme. Ni siquiera estoy segura de porqué lo encuentro tan adorable. Sólo me alegro de que haya encontrado una relación que le haga feliz. Miro mientras Sara se estira, sus ojos abiertos completamente. Se sorprende cuando me ve y yo me siento en la cama poniendo mi mano sobre su brazo. “Los siento. No quería asustarte.”

Ella ríe. “No, está bien. No pretendía quedarme dormida.” De pronto frunce el ceño. “De todos modos, que estás haciendo aquí?”

Evito una sonrisa, intentando no dejarla ver mi sorpresa. Definitivamente es una persona que va por delante. “Papá le contó a Mamá lo de la abuela y, bueno, ninguno quería subir y encontraros a los tres practicando sexo así que me mandaron a mi.”

Sara ríe. “Mierda!” Mira a Gus y con cariño le acaricia la mejilla. Puedo ver una lágrima formándose en su ojo. “Tu abuela es una verdadera zorra.” Empieza a temblar. “Lo siento. Yo… yo…” Corta las emociones que puedo escuchar en su voz. “Es simplemente que lo quiero mucho, Gwen, y odio verle herido. No había razón para que ella fuera tan cruel.”

Alargo el brazo y toco el pelo de Gus, luego miro a Sara. “No debería haberla invitado. Supongo que sólo esperaba que un día cambiara, pero si hubiera sabido que ella podía ser así con vosotros tres nunca le habría mandado una invitación.”

“No es culpa tuya Gwen.”

Le palmeo la pierna esperando que tenga razón. “Ahora, hermanita, despierta a los chicos y os veré a los tres abajo en la despedida de soltera.”

Me mira alucinada. “Hermanita?” ríe. “Creo que eso me gusta.”

Apoyo mi cabeza en la suya y le doy un abrazo. “A mi también.”

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Brian POV

Me siento aliviado al ver a Justin sentado a mi lado. Sé que estamos en esto juntos. Me sonríe, alargando la mano para apretar la mía. Miro a los poderosos ojos verdes de Crystal que siempre han guardado mucha sabiduría y conocimiento incluso cuando era una niña.

Crystal nos mira intensamente. Cerrando los ojos respira unas cuantas veces y luego coge sus cartas partiendo la baraja en dos. Noto que su mano empieza a temblar mientras que ella dudando empieza a barajar. Respira profundamente y empiezan a formarse lágrimas en los lados de sus ojos cerrados. Contiene la respiración y luego respira profundamente, dejando con cuidado las cartas a un lado de la mesa. Levanta la cabeza y abre los ojos.

Ellos tienen una fuerza que manda escalofríos a través de mis huesos. Instantáneamente me doy cuenta que no conozco a la mujer que está sentada frente a mi. Justin y yo nos miramos y puedo sentir de nuevo el miedo de lo desconocido corriendo por lo más profundo de mi espíritu. Una parte de mi sabe que necesito irme. No estoy seguro de que me dirá, pero no creo que quiera saberlo.

Me levanto apresuradamente y empujo mi silla hacia atrás. Crystal también se levanta y se mueve rápidamente para bloquear la entrada de la tienda mientras me gruñe. “Te sugiero que te sientes de una puta vez!” Echa la cabeza a un lado de manera estúpida, luego sus facciones se suavizan. “No deseo asustarte. Crystal no sabe que estoy aquí pero necesito advertirte. Esta es tu última posibilidad de hacer bien las cosas.”

Me siento de nuevo sintiendo como la ira se forma dentro de mí mientras veo como algo se apodera de Crystal. Me siento y junto las manos, apoyándome en la mesa. “Quien coño eres tu?”

Se inclina hacia mí y sonríe. Puedo sentir fuego ardiendo en sus ojos. “Soy tu última posibilidad así que te sugiero que me escuches. Siglos atrás compartisteis sangre. Yo soy esa sangre. Yo soy el que está en tus pesadillas más oscuras. Soy el espíritu que creaste aquella noche. Yo merodeo dentro de vuestras almas. Sin mi no podríais existir. Cuando me trajiste a esta existencia sin saberlo lanzaste un maleficio sobre vosotros. Os habéis conocido vida tras vida pero en cada vida os separasteis en condiciones desafortunadas.” Se gira y me mira a mí directamente. “Brian, tu eres el que tiene el corazón más duro. Incluso lo dijiste cuando sangrabas. Tus palabras fueron contraproducentes a tu magia, enviándola a un remolino de caos. Huyes a través del tiempo una y otra vez, incluso hace sólo un momento en la habitación pensaste en huir. Justin siempre se queda roto y muchas veces pierde su cordura, perdiéndose dentro del laberinto de su propia mente, donde la cordura y la locura se encuentran. Brian, tú serás al que culpen si le pasa eso otra vez. Tú serás el que lo encuentre dentro de años encerrado dentro de sí mismo, apartado del mundo real. Cuando lo supere su espíritu podrá seguir y curarse. El tuyo vivirá eternamente en tu propio dolor y pena.”

Siento como crece mi enfado. “No podría hacer eso otra vez. Esta vez he aprendido. Joder!” Me paso las manos por el pelo levantándome y caminando de un lado a otro. “Por qué haría eso? Por qué huiría otra vez?”

Ella ríe perversamente. “La cuestión no es por qué podrías hacerlo? La cuestión es por qué no podrías? Esto es lo que haces Brian. Para hacer esto es para lo que me creaste, maldito estúpido!”

Justin se levanta y me mira. Sus ojos tienen una sombra de azul oscuro que nunca antes había visto. Le grita al ente. “Si piensas que te trajo a este mundo para destruirnos, eres tu el que se equivoca.” Saca una pequeña navaja de su bolsillo y la abre. Justin pone el afilado objeto en su palma metiéndolo en su carne. Disimula un gesto de dolor y se queda sin aliento mientras la sangre sale a la superficie. Lo miro con un poco de pánico, preocupado por su seguridad. No quiero exponerlo a nada que pueda tener cuando nuestra sangre conecte. “Dame tu mano,” dice severamente.

De pronto recuerdo que han pasado seis meses sin que ninguno de los dos haya estado con nadie más y nuestras pruebas estaban limpias. Sonrío a Justin sabiendo que no hay vuelta atrás, no importa cuántas veces pueda pensar en huir. Estiro mi mano confiando en mi amante mientras siento el dolor punzante entrando en piel. Respira profundamente y posa su mano sobre la mía mientras empieza a decir. “Mentira de nuestras vidas, muerte de nuestra fachada. El amor es nuestro único triunfo. No más problemas, no más preocupaciones, no más huidas, nuestras almas son una!” Mira profundamente en mi alma. “Tú eres el único, mi corazón late en ti mientras el tuyo late en mi.”

Una sensación de hormigueo recorre mi cuerpo mientras nuestra sangre se junta. Nuestros dedos enlazados mientras una explosión de luz sale por la tienda electrificando nuestras almas. Miro a Crystal y veo que su cuerpo emana brillos dorados. Miro mientras el ente sale de su cuerpo. La mujer va vestida con ropa egipcia elegante. Besa a Crystal en la mejilla y la guía hasta sentarla. Crystal cae sobre la silla con una mirada borrosa.

La mujer se acerca hacia Justin y hacia mí y con suavidad coge mi mano y la de Justin. Nos mira con cariño mientras dice suavemente. “Os habéis curado y sanado. Ahora seréis capaces de seguir juntos en este camino de la vida y hacia el siguiente.”

Estudio a la mujer confuso. “Así que nos has engañado?”

Sonría e inclina la cabeza, besando gentilmente mi mano. “No querido, no os he engañado. Sólo te enseñé lo que podría haber sido tu destino si no sobrepasabas el maleficio que te echaste a ti mismo. Te mostré que podías vivir y ser feliz. Te mostré que tienes más por lo que vivir de lo que tienes ahora.” Me besa en la mejilla y luego besa a Justin.

El sonríe y pregunta. “Quien eres?”

Ella le sonríe. “Soy tu madre.”

El frunce el ceño. “Dijiste que él te había creado.”

Ella asiente entendiendo su confusión. “Soy vuestra sangre. Soy la que os llena de vida a vosotros y a todas las cosas vivas. Muchas tomadas de mí y no devueltas a la tierra. Parte de mi fue tomada esa noche y manifestada en un caos dentro de vuestros espíritus.” Se separa de nosotros. “Caminad en paz, queridos míos.”

Miro mientras ella asciende y me siento en la silla sintiéndome extremadamente exhausto. Justin se deja caer en mi regazo y me toma la cara con las manos. Me besa y respira contra mis labios. “Cuantas veces crees que tenemos que curarnos y sanarnos? Cada vez que creo que hemos saltado un obstáculo aparece otro.”

Río mientras la sensación de cosquilleo me atraviesa otra vez. Acerco más a Justin y lo beso fervientemente. Siento una nueva chispa de esperanza. “Ahora hemos pasado eso.”

Miro a Crystal y ella me sonríe, buscando las cartas. “Lo siento. He perdido lo que estaba pensando. Bueno, donde estábamos?” Suavemente baraja las cartas y luego las coloca sobre la mesa.

Justin y yo nos miramos sorprendidos y susurro en su oído. “Bueno Sunshine, listo para otro round?”

El ríe suavemente y vuelve a su silla. “Claro, por que no?”

Crystal nos sonríe y luego me mira. “Recientemente has hecho las paces con alguien de tu pasado que te causó mucho dolor de corazón.”

Asiento pensando en mi padre y todos los acontecimientos raros que han pasado en las últimas dos horas. “Sí.”

Tiene una expresión de confusión en la cara. “Las cartas también me dicen que recientemente has pasado por una transición extrema en tu vida. Has alterado tu destino para mejor.”

Me aclaro la garganta y siento las emociones creándose dentro de mí. “Dice lo que podría haber pasado si no hubiera hecho esa transición?”

Ella asiente y me mira con solemnidad. “Ibas por un camino de auto destrucción. Podrías haber perdido todo.”

“Y ahora?”

Se inclina en la mesa poniendo su mano en la mía. “Ahora lo has ganado todo. Veo que es una ocasión especial,” ríe suavemente. “Pero ya nos habíamos enterado de eso. Las cartas sólo lo están confirmando.” Echa algunas cartas más. “Aún veo otro cambio en tu familia. Vas a mudarte a un sitio más grande para que tu nieto tenga un espacio bonito para correr y jugar.”

Miro a Justin y el me lanza una sonrisa brillante y dice excitado. “Supongo que esto significa que tenías razón sobre el embarazo de Gwen.”

Ambos miramos a Crystal en busca de confirmación. Ella niega con la cabeza y se aclara la garganta. “Eso es algo que tenéis que discutir vosotros con Gwen, pero puedo confirmar que tendréis nietos y un hijo vuestro en el futuro.”

Le levanto una ceja. “Debes estar tomándome el pelo joder. Los dos tenemos hijos mayores. Por qué coño querríamos hacerlo todo otra vez?”

Ríe y me sonríe mientras echa más cartas. “Vendrán acontecimientos inesperados que harán que os replanteéis vuestras vidas, haciendo que queráis crear una familia propia. Uno de vosotros le pedirá a una vieja amiga para que sea la madre.”

Me apoyo en la silla. “Bueno, eso simplemente es increíble joder.”

Justin me mira y ríe. “Bueno, mientras yo no tenga que cargarlo dentro.”

Le empujo juguetonamente. “Capullo.”

Me sonríe brillantemente y se inclina para besarme suavemente en los labios. “Yo también te quiero.” Cuando se separa le saco la lengua y ambos reímos.

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